Al día siguiente de la visita al Valle Sagrado, realizamos la visita a las cuatro ruinas ubicadas cerca de Cusco: Sacsaywaman, Qenco, Pukapucara y Tambomachay. Las entradas a estos sitios también se encuentran incluidas en el Boleto Turístico y se pueden visitar fácilmente en menos de cuatro horas pues son pequeños pero muy atractivos por los paisajes que los rodean. Generalmente el paseo por las cuatro ruinas está incluido en todos los tours por la ciudad de Cusco aunque también pueden ser visitadas por transporte público o caminando desde el centro de Cusco.
Nuestra primera parada del día fue la Iglesia de San Cristobal en donde se puede observar la ciudad de Cusco desde su atrio. Era muy temprano en la mañana y solamente nosotros y unas señoras quechuas con sus llamas se encontraban ahí.
Nos dirigimos a la primera de las cuatro ruinas alrededor de las 9:00am. Saksaywaman es el sitio arqueológico más cercano a Cusco y se encuentra ubicado sobre una colina que mira a la ciudad. Por su privilegiada ubicación fue habitado desde el 900DC. por culturas pre-Incas hasta su expansión del asentamiento por los Incas en el siglo XIII. Su característica principal son las enormes piedras talladas utilizadas en la construcción de los muros. Nomás para darles idea del tamaño de las piedras, la más grande pesa ¡125 toneladas!. Visitamos los principales sectores del sitio, en donde se encuentran la muralla en zig-zag, los templos ceremoniales y un túnel.
Nuestra siguiente parada fue el pequeño sitio arqueológico de Qenco, a lado de Sacsayhuaman. Este sitio ceremonial destaca por su cámara subterránea en donde hay túneles y un altar tallado en el monolito.
Un poco más al norte encontramos la siguiente de las cuatro “ruinas”: Puka Pukara. Este sitio de nombre curioso posee unas vistas maravillosas y amplias desde la cima por lo cual se cree que fue construido como punto de observación y para fines militares.
El último sitio arqueológico de la región de Cusco fue Tambomachay al cual se le conoce como Baño del Inca debido a su asociación con el agua. Posee acueductos, canales y una hermosa fuente (o “baños”) que pudieron haber sido utilizados por la élite Inca como un spa.
La visita a las cuatro “ruinas” concluyó alrededor de las 12pm. Redi ya nos esperaba a la salida para llevarnos al otro lado de Cusco, el Valle Sur, donde visitaríamos los sitios arqueológicos de Tipón y Pikillacta y haríamos una breve parada en Andahuaylillas.
Continuará…
**Gina